lunes, 13 de octubre de 2008

Mi propia receta

Mamá siempre me ha dicho: todo con amor sale bien, solía creerle hasta que hice ese pastel de "él". Le puse toneladas de cariño, una llamada diaria, besos semanales al gusto y dos cucharadas diarias del azúcar más dulce para evitar la amargura que podría surguir al hornearlo. Eso sí, tres tazas de pasión y kilos y kilos de amor, ahora si que entre más mejor.
No sé si mi receta perdió el "toque", o si simplemente se había convertido en algo obsoleto. Después de un tiempo los bocados sabían diferente, o mejor dicho, simplemente no sabían. Los ingredientes fueron reemplazados y fue inevitable agregar esas tres gotas de lágrimas semanales, las peleas mensuales, los puños de dudas... ¿Sabes? probablemente sea mejor cambiar a un pie de queso proximamente.


Escrito en taller en free writing !
con unas cuantas correciones

saludossssssssss =D

3 comentarios:

Francisco dijo...

Te quedó chido!!! Me gusta, me gusta baaastante. Saludos, Griss! :D

Aarón Avilés dijo...

esos pasteles luego salen bien empalagosos... creo que te desvalanceaste un poco con tanto betun. aveces es mejor empezar con unas galletitas o un flanesito antes de aventarte esos pasteles tan complicados..

José Luis dijo...

Dicen que cuando ames, entrega tu amor, mas no tu persona, asi nadie podra poseerte como un objeto, nu sufriras porque el amor no sabe otra cosa que amar...
Pero sabes, no hagas los pasteles como siempre se han hecho, haz el tuyo propio, no esperes el mejor pastel, el mas bonito, el mejor de todos los pasteles..mejor no esperes nada..simplemente hazlo y disfruta cada ingrediente, veraz que esos pasteles duran mucho tiempo...
Saludos desde mi df...
Gracias por tu visita y tus comentarios...